El alpiste, semilla mágica para la salud
El alpiste, esa semilla con la que alimentas a las aves, también puede ser consumido por humanos en distintas formas y traer múltiples beneficios para tu salud.
alpiste
¿Por qué? Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México analizaron el poder del alpiste para humanos y hallaron una buena cantidad de aminoácidos estables y una gran riqueza enzimática. El alpiste tiene un alto contenido de lipasa, una enzima esencial para la digestión de los lípidos. Esta enzima es responsable de descomponer (hidrolizar) grasas para formar componentes que puedan absorberse fácilmente a través de los intestinos, por lo que hace de esta semilla, un alimento recomendado en casos de hipercolesterolemia y en la prevención de la arteriosclerosis.
Además, la lipasa también incrementa el valor nutricional de las grasas naturales que obtenemos de los pocos alimentos buenos y sanos que solemos consumir; disminuye los síntomas de la enfermedad Celíaca y de la indigestión; mejora el estado nutricional general de pacientes con fibrosis quística e impulsa la función inmunológica de nuestro cuerpo.
Como si fuera poco, el alpiste también tiene cualidades para desinflamar nuestros órganos, particularmente el hígado, los riñones y el páncreas. Es decir, el alpiste podría considerarse como un regenerador pancreático, esto es, un aliado contra la diabetes y contra la cirrosis, además de que favorece una saludable eliminación del exceso de líquidos en nuestro cuerpo, lo cual lo hace un excelente apoyo en el tratamiento de afecciones genitourinarias (cistitis) e hiperazotemia (abundancia de sustancias nitrogenadas en la sangre).
Por otra parte, contiene potasio y fibra, ácidos grasos con Omega 3 y Omega 9, vitaminas B, E, y minerales como calcio, magnesio, manganeso y zinc. En fin, un súper alimento. ¿La salvedad? Es aconsejable estar atentos con las trazas de sílice que puede encontrase en su corteza, para lo cual se sugiere un buen lavado y atención al momento de adquirirlo en comercios. También se recomienda no agregar azúcar refinada para preservar su contenido enzimático.
El alpiste (phalaris canariensis), es una planta gramínea de la familia de las pomáceas, originaria del Mediterráneo, pero se cultiva comercialmente en distintos lugares del mundo para alimentación de pájaros domésticos. No obstante, también se usa para el consumo humano desde hace mucho como en Canarias (España), donde lo usan como aperitivo, o en Valle de Bravo (México), en donde se vende el atole de alpiste, para acompañar tamales.
alpiste
¿Por qué? Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México analizaron el poder del alpiste para humanos y hallaron una buena cantidad de aminoácidos estables y una gran riqueza enzimática. El alpiste tiene un alto contenido de lipasa, una enzima esencial para la digestión de los lípidos. Esta enzima es responsable de descomponer (hidrolizar) grasas para formar componentes que puedan absorberse fácilmente a través de los intestinos, por lo que hace de esta semilla, un alimento recomendado en casos de hipercolesterolemia y en la prevención de la arteriosclerosis.
Además, la lipasa también incrementa el valor nutricional de las grasas naturales que obtenemos de los pocos alimentos buenos y sanos que solemos consumir; disminuye los síntomas de la enfermedad Celíaca y de la indigestión; mejora el estado nutricional general de pacientes con fibrosis quística e impulsa la función inmunológica de nuestro cuerpo.
Como si fuera poco, el alpiste también tiene cualidades para desinflamar nuestros órganos, particularmente el hígado, los riñones y el páncreas. Es decir, el alpiste podría considerarse como un regenerador pancreático, esto es, un aliado contra la diabetes y contra la cirrosis, además de que favorece una saludable eliminación del exceso de líquidos en nuestro cuerpo, lo cual lo hace un excelente apoyo en el tratamiento de afecciones genitourinarias (cistitis) e hiperazotemia (abundancia de sustancias nitrogenadas en la sangre).
Por otra parte, contiene potasio y fibra, ácidos grasos con Omega 3 y Omega 9, vitaminas B, E, y minerales como calcio, magnesio, manganeso y zinc. En fin, un súper alimento. ¿La salvedad? Es aconsejable estar atentos con las trazas de sílice que puede encontrase en su corteza, para lo cual se sugiere un buen lavado y atención al momento de adquirirlo en comercios. También se recomienda no agregar azúcar refinada para preservar su contenido enzimático.
El alpiste (phalaris canariensis), es una planta gramínea de la familia de las pomáceas, originaria del Mediterráneo, pero se cultiva comercialmente en distintos lugares del mundo para alimentación de pájaros domésticos. No obstante, también se usa para el consumo humano desde hace mucho como en Canarias (España), donde lo usan como aperitivo, o en Valle de Bravo (México), en donde se vende el atole de alpiste, para acompañar tamales.